Bruselas conmemora a René Magritte

Michel Draguet, director de los Museos Reales de Bellas Artes, me invitó el pasado 17 de mayo a la celebración del 50 aniversario de la muerte de Magritte.

La presentación fue perfecta, Bruselas vestía los colores del aura del gran pintor. Esta exposición fascinante nos trajo a la memoria el surrealismo más noto de la mano del gran Magritte.

Bruselas, pequeña capital encantadora, ofrecía un viaje museal en el tiempo que empezaba en 1400, en el Oldmasters Museum, pasaba por el Museo de Fin-de-Siècle en los años 60 del 1800, seguía por el Museo Magritte que nos abría las puertas del famoso artista y de sus años 50 para terminar en el Museo de Arte Moderno que nos magnífica los artistas contemporáneos.

Pero hablemos de este 2017 considerado el año Magritte. Cómo no concentrar nuestro interés en este artista surrealista que representa tan bien a este pequeño país. Magritte pintó el alma de Bélgica. Su obra es todo un símbolo que marca la conciencia del visitante de por vida. Cincuenta años después de su desaparición sigue estando presente y el pueblo lo recuerda con un inmenso cariño… Quedan grabadas sus nubes en sus cielos azules, sus pájaros, sus manzanas verdes… Esos colores tan intensos e impactantes.
La exposición revela detalles de la atmósfera de Magritte tanto de manera lúdica como pedagógica.

Apuntes y citaciones del pintor acompañan ciertos lienzos como: « Les Amants » (1928), « Le Fils de L’homme » (1964), « Le Double Secret » (1927), creando, en ese espacio, un ambiente muy particular.

Con el fin de que el mayor número de visitantes pueda disfrutar de esta experiencia, los Museos permanecerán abiertos los siete días de la semana, del 13 de octubre 2017 al 18 de febrero 2018. ¡Excelente iniciativa!

El Museo que se sitúa en el Mont des Arts decoró sus muros neoclásicos adornando sus ventanas con lienzos de Magritte, para darle al edificio un toque del más puro estilo del emblemático pintor. Es un panorama único que se puede observar desde la plaza, a modo de introducción, antes de entrar en el propio Museo para empezar la visita de una auténtica caverna del surrealismo.

En esta ocasión, el Museo propone actividades para todos los públicos: para niños acompañados de sus padres, para escuelas, para grupos culturales y también organiza ciclos de conferencias… Toda una intensa gama de exploraciones.

Doscientas treinta obras del artista surrealista reunidas en su ciudad. ¡No puede haber más producto de lujo que lo auténtico! Y aunque uno no lo posee, se siente propietario solo con emprender este viaje de belleza y cultura.

Esperanza Arcos
Socióloga
Experta en Lujo e Imagen de marca